La forma más básica de conectar con otra persona es escucharla. Simplemente escucharla. Quizá lo más importante que podemos dar a otra persona en la vida sea nuestra atención. Y especialmente, si la damos desde el corazón. Cuando las personas hablan, no es necesario que hagamos nada, simplemente recibirlas.
(Rachel N. R.)
De entre todas las formas de conexión entre las personas, la empatía es, sin lugar a dudas, una de las más especiales. Existen muchas definiciones de empatía, sin embargo, no es necesario buscar en la letra ‘E’ del diccionario para conocer el significado real de este concepto. Todos en algún momento de nuestra vida hemos sentido esa caricia en el corazón. Y ese momento, deja huella en nuestra memoria emocional para siempre.
Es frecuente hablar de empatía con la misma facilidad con la que se dice un ‘Te entiendo’. Sin embargo, la empatía no es un ‘te entiendo’ vacío de comprensión, ni tampoco significa dar consejos o explicar ‘qué haría yo en tu lugar’. La empatía no entiende de añadir frases hechas, sino de hacer que sobren las palabras. Supone acariciar el corazón del otro, acompañarle en su sentimiento y mirar más allá de lo que persona nos dice. Porque empatía no es ponerse en el lugar del otro, sino a su lado. Es un hilo invisible que une dos corazones a través de la comprensión, la escucha y la aceptación incondicional. – Sigue leyendo –